Mirada

08/ 27. Dios se oculta en las tinieblas de la muerte y se manifiesta en la luz de la vida. Con una mirada el amante ha pe­netrado a la amada y ésta ha reproducido al amante.

09/35′. Ya no tenemos honra, ni orgullo, ni valor ni virtud; no tenemos saber ni inteligencia; nuestro talento es como el humo y nuestra fuerza parece agua derra­mada. Nuestra piedad permanece como un bote vacío y nuestros días se han vuelto insen­sibles bajo el ardor de la mirada divina. Pero la gracia multiplica el amor secreto que habita nuestro corazón y ya saborea­mos la dulzura del fuego trascen­dente.

18/68. ¿Quién presentará al Altísimo un espejo de amor y de pureza para que él habite de nuevo entre nosotros en el esplendor primero y último? Nuestra virgen ha concebido bajo la mirada del Altísimo y nos ha dado un Hijo que ha vencido la muerte y que perfeccio­nará a todos sus hermanos lisiados.

20/65′. Lo de fuera es poca cosa para aquel cuya luz brilla dentro, ya que ve a través de las cortezas y penetra más allá de la muerte. «Cuanto más consumamos nuestras corte­zas, más resplandecerá nuestra luz bajo la mirada del Altísimo. He aquí lo que los malvados no comprenderán.»

28/15. ¿Acaso no hago bien con­tem­plando la faz de mi Señor? ¿Acaso no hago bien exponiéndo­me al amor del Único Esplendor? Dame, Señor, el cuerpo impere­cedero y puro, el único que puede sostener sin per­juicio tu miradaamorosa y penetrar hasta el reposo de tu santa profundi­dad.

30/21. El terror de los malvados llegará entonces a su colmo y su jactancia, que triunfaba, se volverá muda de pavor, porque su agua los abandonará y se seca­rán bajo la mirada del Altísimo, que los reducirá a cenizas.

Letanía 74. Mirada insostenible.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies